Título original: Kingdom of Heaven
Año 2005
Duración 144 min.
País: Reino Unido
Director: Ridley Scott
Guión: William Monahan
Música: Harry Gregson-Williams
Fotografía: John Mathieson
Reparto: Orlando Bloom, Eva Green, Jeremy Irons, Liam Neeson, David
Thewlis, Brendan Gleeson, Edward Norton, Michael Sheen, Marton Csokas, Ghassan
Massoud, Alexander Siddig, Velibor Topic, Kevin McKidd, Khaled Nabawy, Iain
Glen, Jon Finch, Robert Pugh, Ulrich Thomsen, Giannina Facio, Nathalie Cox,
Bronson Webb, Nikolaj Coster-Waldau, Alex O'Dogherty
Género: Aventuras. Romance | Edad Media. Siglo XII. Cine épico
Sinopsis:
Siglo XII, las Cruzadas. Godofredo de Ibelin (Liam Neeson),
caballero respetado por el rey de Jerusalén y comprometido con el mantenimiento
de la paz en Tierra Santa, emprende la búsqueda de su hijo ilegítimo Balian
(Orlando Bloom), joven herrero francés que llora la pérdida de su mujer y su
hijo. Godofredo convence a su hijo para que lo acompañe en su misión. Tras la
muerte de su padre, Balian hereda sus tierras y su título de caballero en
Jerusalén, ciudad en la que cristianos, musulmanes y judíos han conseguido convivir
pacíficamente durante la tregua entre la Segunda y la Tercera Cruzada. Con una
fidelidad inquebrantable, Balian sirve a su rey y, además, se enamora de la
princesa Sibylla (Eva Green), la enigmática hermana del monarca.
Lo que más me gusta de esta peli es la visión que da de las Cruzadas, en general de la relación oriente con occidente. La desconfianza y la absoluta falta de entendimiento entre dos mundos seperados por la religión. Pero es una visión exenta de fanatismo, nada de producciones a lo Hollywood años 60, que hacían una trasposición literal del far west al Medio Oriente, cambiando los indios por los moros. No, esas chorradas no tienen cabida en esta película de Ridley Scott, un director de prestigio y con las ideas muy claras.
Lo que más me gusta de esta peli es la visión que da de las Cruzadas, en general de la relación oriente con occidente. La desconfianza y la absoluta falta de entendimiento entre dos mundos seperados por la religión. Pero es una visión exenta de fanatismo, nada de producciones a lo Hollywood años 60, que hacían una trasposición literal del far west al Medio Oriente, cambiando los indios por los moros. No, esas chorradas no tienen cabida en esta película de Ridley Scott, un director de prestigio y con las ideas muy claras.
Desde el principio le enmienda la plana a los cristianos,
que van en su mayoría a Tierra Santa a por gloria, riquezas y vivir la vida,
con escaso o nulo respeto por las gentes y cultura del lugar. Un atropello más
de la apestosa civilización occidental, el puto hombre blanco que se dice. Por cierto,
un tema que sigue vigente a día de hoy, la lucha islámica contra el mundo
occidental, aunque seguramente por razones distintas, si bien en el fondo
subyace la misma mierda de siempre, el poder y el dinero, la religión es la
excusa, la careta engaña monos.
La fotografía es buena, los actores también, excelente banda sonora, buen guión...
En fin, que tenemos todos los ingredientes para pasarlo bien y además
reflexionar un poco. Por medio se cuela la eterna historia de amor imposible,
lo que menos me gusta de la peli, altamente previsible y que quizás sea el
tributo a pagar para atraer a las masas borreguiles. Recomendable, en todo
caso.
Trailer:
me gusta esta peli, sobre todo el tio de la máscara de cuero. Me sobra orlando bloom, que lo veo más para anunciar compresas con alas que de tio duro.
ResponderEliminarjajaja sí, es que lo de Bloom es de traca
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