Cuentan las crónicas que en 1963 Ford estaba interesada en
comprar Ferrari, y comenzó un largo y costoso proceso que acabó con un épico
“cerrojazo” por parte de Don Enzo, un gesto propio de su vehemente personalidad
que encendió las iras del gigante americano. En mi opinión, lo único bueno de
la particular manera de ser de “il Commendatore” es que gracias a ello nacieron
dos mitos del automóvil: Lamborghini y el Ford GT 40.
Tras recibir el tosco “no” desde Italia, Ford dio la
siguiente orden a sus ingenieros: “ya que Ferrari no puede ser nuestra, quiero
que la borremos de los podios en competición”. Dicho y hecho. Apenas dos años
después, los coches del óvalo arrasaban en la carrera más importante del mundo,
consiguiendo la victoria en las 24 Horas de Le Mans en 1966, 1967, 1968 y 1969.
El mítico GT 40
Pues bien el Ford GT es el descendiente directo, el hijo
predilecto, del GT40. El Ford GT es un automóvil superdeportivo que fue
construido por Ford Motor Company desde 2003 hasta 2006. Se inició como un
prototipo diseñado en previsión del centenario de Ford, y como parte de su
campaña para exhibir y reactivar su "patrimonio" de nombres como Ford
Mustang y Ford Thunderbird.
Sin embargo, no se reutilizó el nombre GT40, puesto que la
autorización del uso comercial de la combinación GT40 pertenecía a una compañía
de refacciones ubicada en Ohio llamada Safir, que pidió a Ford 40 millones de
dólares por ceder el nombre que hábilmente había registrado cuando todos ya
habían olvidado las victorias del GT40 en las 24 Horas de Le Mans.
Para Ford, el GT era el boleto de entrada a un segmento de
autos en el que nunca había competido, en el de los Súper Autos al nivel de
Ferrari, Lamborghini o alguna que otra creación exótica y para solidificar el
proyecto la marca del óvalo se alió con algunos proveedores externos clave como
Saleen Special Vehicles ubicado en Troy, Michigan quien se encargó de la
pintura y el armado artesanal del vehículo, el motor V8 de 550 HP provenía de
la planta de Ford en Romeo Michigan, para terminar el ensamble total en las
instalaciones de SVT (Special Vehicle Team) de Ford en Wixcom, Michigan.
El interior del GT dista mucho de ser lujoso, al contrario
hay detalles que desilusionan mucho, como el control remoto de la llave o la
calidad de ensamble, las gomas de las puertas se aprecian “olanudas” y la
calidad de plásticos delata que el auto fue desarrollado en la peor época de
calidad de Ford. Pero hay cosas que realmente sorprenden, el túnel central es
de aluminio, con una calidad digna de una nave espacial, los controles de aire
acondicionado se sitúan en esta pieza, el grabado es perfecto y la sensación al
manipular los botones y perillas –también de aluminio- brinda ese “toque”
Premium, la palanca de cambios también tiene lo suyo –bueno y malo- la perilla
es forjada en aluminio, con un maquinado simplemente perfecto, pero el hule de
la palanca demerita y es más burdo que el de un Ikon en su versión más austera.
Como ocurrió con muchos vehículos exóticos, cuando el Ford
GT fue lanzado por primera vez, la demanda superó la oferta, y los coches
vendidos inicialmente fueron a precios superiores. La primera venta privada de
Ford con motor de coche deportivo se completó a mediados del 4 de agosto de
2004, cuando el ex ejecutivo de Microsoft, Jon Shirley hizo la entrega del Ford
Midnight Blue GT en 2005. Shirley había ganado el derecho para comprar la
primera producción del Ford GT (con chasis # 10) en una subasta benéfica en el
Pebble Beach Concours d'Elegance después de que la licitación de la subasta lo
subastó en más de US$ 557.000. Algunos otros coches al principio fueron
vendidos en US$ 100.000 más respecto al precio de venta sugerido de $US 139.995
sin extras y antes de transporte e impuestos (Ford aumentó el precio sugerido
de $US 149.995 sin extras y antes de transporte e impuestos el 1 de julio de
2005). Los coches opcionales disponibles incluyen un sistema de sonido
McIntosh, franjas de competición pintadas a mano, pinzas de freno rojo o gris
(negro de serie), y llantas de aleación BBS forjadas más ligeras, agregándole
un adicional de US$ 13.500 al MSRP.
La campaña de producción del modelo GT fue
de 4.038 coches, terminandose para el año 2006 el 21 de septiembre de 2006, por
debajo de los 4.500 previstos inicialmente. La planta de Wixom paró la
producción de todos los modelos hasta 31 de mayo de 2007. Las ventas de la GT
continuaron en 2007, con de los coches de los concesionarios que obtuvieron
unidades en el sorteo que realizó el fabricante. El coche apareció en la
portada del videojuego Gran Turismo 4. Con una producción tan limitada tanto en
unidades como en años de comercialización, el Ford GT, sucesor del GT40, se ha
convertido ya en un clásico objeto de deseo para coleccionistas.
Para hacernos una idea de lo que estamos hablando, el mítico
Ford GT40 Gulf número P/1074, el que perteneció a Steve McQueen y con el que se
rodó la película ‘Las 24 horas de Le Mans‘ en 1970, ha establecido un nuevo
récord en materia de coches americanos llevados a subasta al recaudar 11
millones de dólares. Con esta cifra ha desbancado al Duesenberg Model J
Long-Wheelbase Coupé de 1931, que obtuvo 10,34 millones en 2011.
Rendimiento:
0 a 96 km/h (0-60 mph): entre 3,3 segundos, 3.6 segundos, a
3.7 segundos
0 a 160 km/h (0-100 mph): 7,4 segundos
0 a 241 km/h (0 a 150 mph ): 16,9 segundos
Velocidad máxima: 330 km/h (204.6 mph)
gran currelo, y que pedazo de coche
ResponderEliminarte lo regalaré por tu cumple...
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