Título original: Prisoners
Año: 2013
Duración: 146 min.
País: Estados Unidos
Director: Denis Villeneuve
Guión: Aaron Guzikowski
Música: Jóhann Jóhannsson
Fotografía: Roger Deakins
Reparto: Hugh Jackman, Jake Gyllenhaal, Viola Davis, Maria
Bello, Terrence Howard, Melissa Leo, Paul Dano, David Dastmalchian, Dylan
Minnette, Erin Gerasimovich, Kyla Drew Simmons, Zoe Soul, Len Cariou, Wayne
Duvall, Sandra Ellis Laffert
Productora: WB / Alcon Entertainment / 8:38 Productions /
Madhouse Entertainment
Género: Thriller | Secuestros / Desapariciones. Venganza
Sinopsis: Keller Dover se enfrenta a la peor pesadilla de un
padre. Anna, su hija de seis años, ha desaparecido con su amiga Joy y, a medida
que pasa el tiempo, el pánico lo va dominando. Desesperado, decide ocuparse
personalmente del asunto. Pero, ¿hasta dónde está dispuesto a llegar para
averiguar el paradero de su hija?
Premios: 2013: Festival de Toronto: Finalista al Premio del
público (Mejor película)
Aprovechando la semana de cine a precio razonable que nos brinda no sé muy bien quién, y desafiando a las riadas de gente que hacían colas interminables y le quitaban las ganas a uno de sentarse en la butaca, me fui esta semana a ver Prisioneros. Los thrillers policíacos, como la novela negra, nunca han sido santo de mi devoción, sin embargo he de reconocer que esta es una muy buena película y que la espera entre gritos de adolescentes y palomitas volando por el aire valió la pena, aunque seguramente se degustará mucho mejor en una sala medio vacía, como pasa en los cines la mayor parte de los días.
Dos familias se enfrentan a la desaparición de sus dos hijas, unas niñas pequeñas. Se monta el show policial y mediático y toda esa historia que hemos visto mil veces. Pero ahí empieza lo bueno: el face to face entre Jackman y Gyllenhaal, sencillamente soberbio. Me han soprendido los dos. El primero, que hace de padre de Anna, porque acostumbrados como estamos a verlo con las uñas largas en su papel de Lobezno es realmente sorprendente ver que este señor es capaz de realizar una labor interpretativa realmente meritoria, no solo sabe pegar, también se expresa muy correctamente, sorpresa agradable. El segundo me sorprendió porque no sabía nada de él y realmente lo clava, su actuación es memorable, como policía encargado del caso, que sufre las presiones de todos los frentes, de las familias, de sus jefes, de los medios y la suya propia, obligado moralmente a resolver el caso.
El guión pone sobre la mesa, más allá del argumento central, temas morales y de amplio calado. Como la actuación al margen de la ley cuando realmente te juegas lo importante, tu vida o la de los que amas. En ese sentido, Jackman lo borda a lo largo de toda la peli, especialmente destacados sus enfrentamientos con el inspector a cargo de la investigación, sin duda, las mejores escenas de la cinta. Quién no se ha visto reflejado en la actuación de Jackman cuando la policía le pide que se serene, que guarde la compostura y que no se eche pedos? Por supuesto, reacciona con la virulencia propia de un padre que está dispuesto a todo con tal de recuperar a su hija.
También están muy bien plasmados en la peli los dramas familiares que se producen en este tipo de situaciones, como la tensión, el paso de los días y la desesperación influyen sobre los miembros de la familia y van erosionando la relación entre ellos, sus vidas se van oscureciendo, haciendo de ellos auténticas sombras errantes.
Por lo que respecta a la trama, ya digo que no soy un asiduo de este tipo de pelis, creo que está muy bien construida y mantiene la tensión y la intriga hasta el final. No voy a desvelar el desenlace, pero vale mucho la pena. No me extrañaría que el señor Jake Gyllenhaal se llevase el Oscar al mejor actor secundario, si es que se le puede considerar secundario, sencillamente genial.
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