Ha desaparecido de la faz de la tierra una de esas personas que parece que todo el mundo quiere. Su fallecimiento ayer ha levantado pesares y recuerdos en todos los continentes, con todos los gerifantes manifestando sus condolencias, pero, lo más importante, con todo el pueblo africano unido entorno a su figura. En los tiempos que corren, de egoísmo absolutista, es cada vez más difícil encontrar a personas como Mandela que sacrifiquen lo que tienen hasta el límite en pro de un colectivo, de un pueblo o de una nación. Eso es lo que hizo Mandela, sepultó 27 años de su vida entre rejas para luchar contra la dictadura establecida en Sudáfrica, además siempre lo hizo sin llamar a la violencia, sino a las conciencias. Por eso creo que bien merece el calificativo del Ghandi Africano.
Mandela fue el prisionero número 466/64, es decir, que fue el
preso número 466 en 1964 en la isla de Robben, durante 17 años en precarias
condiciones. Posteriormente pasaría otros 10 años más en otras dos prisiones
diferentes, sumando una pena total de 27 años. El gobierno de Sudáfrica rechazó
todas las peticiones de que fuera puesto en libertad. Mandela se convirtió en
un símbolo de la lucha contra el apartheid dentro y fuera del país, una figura
legendaria que representaba la falta de libertad de todos los hombres negros
sudafricanos.
Algunos personajes famosos deberían ser borrados de los libros de Historia por todo el mal que han hecho a la humanidad, otros en cambio habría que clonarlos para hacer un mundo mejor. Mandela sería de los primeros en la lista de clonación.
puede que el último mito que quedaba sobre la faz de la tierra.
ResponderEliminarNo sé si el último mito, pero está claro que cada vez es más raro que salgan líderes de este calado, hechos de esta pasta. El capitalismo ha vencido al idealismo, al menos de momento. En breve publicaré sobre el último libro de Julio Anguita que es revelador en este sentido.
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