Pedales automáticos o los planos convencionales? La
respuesta es sencilla: para el que nunca haya probado los pedales automáticos
el cambio puede ser un poco traumático al principio, pero en cuanto te
acostumbres no querrás volver a la edad de piedra de los pedales planos. El
ciclismo en carretera es un deporte que requiere que uno vaya cómodo y con
confianza encima de la bicicleta, sólo de esa manera podrás disfrutar a tope de
este deporte, con seguridad y fijándote nuevos retos o metas.
Por eso, es recomendable que si nunca has utlizado calas con anterioridad, practiques un poco en casa el movimiento de fijación de la cala al pedal
y de extracción del mismo. Ten en cuenta que cuando sales a carretera pueden
surgir un montón de imprevistos y quizás sea necesario que eches pie a tierra.
Si vas por ciudad o atravesando núcleos urbanos es más que probable que te
tengas que detener en algún semáforo o rotonda, y para no caernos y dar el
espectáculo, además de posibles lesiones, es conveniente estar habituado al
movimiento de engache y desenganche. Así que, si no tienes costumbre o es la
primera vez que sales a carretera con calas, practica antes en casa o en una
calle poco concurrida y sin tráfico. La confianza es fundamental.
No es por ser cenizo, pero si en algún momento ves que no
eres capaz de sacar la cala del pedal hay que saber caer. Parece un chiste,
pero no lo es. Apoyar la mano o sacar los codos en una caída puede significar
una lesión de muñeca o en el brazo. Por tanto, si ves que no te da tiempo o no eres capaz de sacar los pies déjate caer a plomo, como si fueses un bloque de cemento, de
esta manera caerás con la parte lateral del cuerpo (muslos, hombros, cadera) y
no sólo con un punto concreto, el golpe se amortigua y se reparte a lo largo de
todo el costado y es más difícil que existan lesiones. Yo lo he probado, involuntariamente
claro, y funciona.
Otro tema importante es un buen ajuste de las calas. Unas
calas mal fijadas darán lugar a la pérdida de potencia y, lo que es más
importante, posibles lesiones, sobre todo en rodilla y tobillos, con el tiempo
incluso en la espalda o cuello.
Cómo fijar las calas? Bueno, por si acaso, las calas son
esas piezas que se atornillan a las zapatillas de ciclista y que permiten fijar
éstas a los pedales. Por tanto, si eres nuevo, necesitarás unas zapatillas y
unas calas para las mismas, y si tu bici viene equipada con unos pedales planos
pues tendrás que comprar unos automáticos. Una salsa, vaya, pero vale la pena.
Bien, la mejor forma de saber si necesitas variar la posición
de las calas en otro ángulo es pedaleando, es de perogrullo, vale, pero es así.
Los talones no deben apuntar mucho ni hacia arriba ni hacia abajo. Si el talón
se estira demasiado cuando pedaleas ejercerá presión sobre el ligamento medio
de la rodilla y los ligamentos de la parte externa del tobillo. Por el
contrario, si los talones están demasiado cerca del pedal es posible que
sientas dolor al caminar o correr. Conclusión, si a raíz del uso de calas
empiezas a notar molestias en tobillos, talones o rodillas, cuidado porque
puedes tenerlas mal ajustadas.
La posición neutra es el mejor punto de partida para
descubrir la alineación ideal de las calas, donde la línea central de la cala
se alinea con la línea central de la zapatilla, ahí el ángulo de la cala es de
cero grados. Yo las llevo ajustadas a cero grados y me va bien, pero cada uno
debe sentirse cómodo con su postura y su bici. Si las rodillas no van rectas o
pegas/alejas demasiado los talones, tendrás que ajustar las calas a partir de
ese grado cero, por eso decía lo de pedalear, es la forma de comprobar que están
en la posición correcta. Si te lías, consulta a un profesional o a alguien
experimentado, porque no es un tema baladí.
Es verdad que el ciclismo con calas implica un coste mayor
que si utilizamos los pedales convencionales de toda la vida, esos de la cinta
ajustable alrededor del zapato. Pero hay que tener en cuenta que ganamos en
aprovechamiento de energía, en comodidad en el pedaleo y que además la inversión
te durará mucho tiempo, la vas a amortizar. Las zapatillas en sí deberían
durarte muchos años y las calas las puedes cambiar si se desgastan. Las
zapatillas de carreras deben ser rígidas para optimizar el rendimiento o, dicho
de otra forma, si puedes doblar la zapatilla con las manos... malo.
Pero lo más importante de todo es sentirse seguro encima de
la bicicleta. Si pruebas las calas y no te aclimatas o vas inseguro, es mejor
que practiques antes de echarte a carretera, o que sigas con los pedales de
toda la vida.
A rodar!
jajaja ciclismo de carretera, menudo vicio teneis en el cuerpo tu y alba. Ya te veo comentando el tour
ResponderEliminares un deporte de lo más adictivo, casi tanto como el Metal, con eso te lo digo todo. Lo del tour no es mala idea...
ResponderEliminarBuena entrada, habrá que volver a poner a currar al metatarsiano ese. besos!
ResponderEliminarPonte tu bici a punto y no me toques la moral, a ver si quedamos!
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