1.Human Remains 07:35
2.Lost in the Fray 04:18
3.A Place to Hide 06:00
4.Founders of Time 07:40
5.Ember 07:01
6.Bloodwritten 15:28
7.The Answer 08:33
8.Ceres 06:25
9.Wanderer 08:02
Øystein Kummen - Bass
Håkon Obdsaija Bergstad - Drums
Jarle Olsvoll - Vocals, Guitars
Martin Legreid - Guitars
Banda noruega que
edita su tercer album, se mueven entre un progresivo y el thrash metal, al menos eso es lo que se dice de ellos o lo que nos quieren vender, curiosa combinación en todo caso. Vamos
a ver qué dan de sí los temas.
Human Remains, efectivamente es una muestra de los ritmos
progresivos y los thrasheros que se gastan estos señores. Dentro del progresivo
combinan la voz del vocalista, con un deje al cantante de SymphonyX, aunque ni
de lejos tiene su calidad, con los ritmos repetitivos y las estructuras melódicas
típicas de este estilo. Del thrash cogen en este primer corte unos riffs de lo
más simples que uno pueda imaginarse, además de alguna galopada de batería y
bajo. Pero está más que claro que el tema tiene más de progresivo que de otra
cosa. También encontraremos algún aire doom insertado en medio de
la disertación de progresivo que se marcan. Pero lo más importante es que es un
tema que no acaba de enganchar, sin una dirección clara y definida, aunque sí
nos deja algún momento interesante, pero lo que predomina es el tedio.
Lost in the Fray empieza a cañón, batería y riff thrash
pegadizo, pero en seguida se van metiendo por la vereda del progresivo otra
vez. Quizás si eres un amante del metal progresivo esto te la ponga dura, a mi
por el contrario me parece un dolor de muelas, sobre todo cuando ves que los
tipos podían tirar hacia el lado más cañero y en cambio se inclinan más hacia
el rollo Dream “Coñazo” Theater.
A Place to Hide parece una réplica del tema anterior, ya que
nos pone la miel en los labios con unos riffs poderosos pero finalmente acaban
de nuevo durmiendo a las ovejas con sus divagaciones, aunque este tema es más rápido
y más contundente que los anteriores. El solo melódico y con partes lentas y rápidas
no está mal y marca un punto de inflexión, a partir de ahí el corte se
vuelve muy lento.
Founders of Time abre una ristra de temas de larga duración,
con una especie de intro acústica muy larga y con sonidos arabescos. Luego el
previsible cambio de ritmo y a correr. El problema de este grupo es el que
tienen la mayoría de las bandas progresivas y es que se pierden por los cerros
de Úbeda, dando vueltas sin sentido, con riffs por aquí y por allí que no casan
nada los unos con los otros, al final ya no sabes si estás escuchando un disco
de metal un homenaje a Paco de Lucía. Un laberinto de sonidos que se va espesando
con el paso de los minutos, sólo al alcance de los amantes del género.
Ember se inicia con un anodino riff que se repite hasta la
saciedad, carente de fuerza. Y luego se acelera aún más el tema, cayendo de
nuevo en el estilo progresivo que nos acompaña desde el principio. La voz del
vocalista sin ser mala es demasiado monótona e incide en que todos los temas
suenen muy parecidos. Este es de los temas que tienen paradita en medio, pero
una parada de esas en las que te empieza a caer la babilla, la siesta es
inevitable. Aunque la arrancada es quizás lo mejor del tema, muy al estilo
Opeth, demasiado tarde para salvar el corte.
Si hasta ahora te has pasado la mayor parte del tiempo
bostezando, el siguiente tema supongo que te producirá, como a mi, escalofríos,
pues son más de 15 minutos de desbarre mental. Nos movemos entre un rollo
rockero, algún ritmo thrasher y todo ello bañado con la patina de progresivo de
somnífero que se gastan estos 66Crusher. Que sí, que se ve que tienen calidad,
pero para mi hay dos tipos de rollo progresivo: uno, el que quiere demostrarlo
y otro el que hace música variada para diversión y no para lucimiento. Este tema
es una prueba más de que el grupo se mueve más en el primer tramo que en el
segundo, aunque no son tan pesados como los Dream Theather, ciertamente, de vez
en cuando se permiten echar un par de cuernos.
The Answer empieza por enésima vez con acústicas, a estas
alturas tu madre ya te habrá cambiado el babero, de lo contrario habrás puesto
el parquet todo perdido y lo peor es que te dará igual, lo único que quieres es
acabar el disco como sea. Y este tema, amigo mío, no te va a ayudar en ello, al
contrario es tan parado que tendrás que tomarte el pulso para comprobar que
sigues vivo.
Ceres, o lo que demonios signifique, es otro tema lento como
el paso de los siglos. A mitad cambia hacia un rollo doom que no les queda mal,
pero lo malo es que se atrancan cada dos por tres. Meten buenos solos y vuelven
a caer en el rollo cervantino...
Wanderer. Si has llegado hasta aquí enhorabuena, ya estás
solo a 8 minutos de conseguir la proeza de terminar el disco. Y es que es un
disco que se hace largo como un domingo sin dinero. El disco es largo, pero
estos lo hacen todavía más, juegan con nuestra mente, torturándola la mayor
parte del tiempo. La verdad, no sé si la etiqueta de thrash progresivo que se
lee por internet se la han comprado estos o se la puso algún genio de las
ondas, pero si esto es thrash entonces es que ese subgénero está echado a
perder. Esto es rollo progresivo en un 95%, y del tedioso.
Puntuación: 3,5/10
toda una proeza escucharse este album tu lo has dicho.
ResponderEliminarhay que ser un maestro zen para escucharse este disco sin perder los nervios
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