1.Intro 00:54
2.Tormented 02:21
3.The Power of Lust 04:51
4.The Great Deceiver 04:47
5.The Rejection 02:31
6.Maniacs 03:05
7.Italian Bastards 03:36
8.Schizofrenic Paranoic
04:07
9.Sign of the Cut 05:10
10.Cunts Must Die 04:40
Rot - Bass, Vocals (backing)
Dog - Vocals, Guitars
Iago Bruchi - Drums
Este es el tercer disco de esta banda Thrash italiana,
activos desde 2009 y que como vemos no han perdido el tiempo, quién decía que
no se pueden tomar cañas con los colegas y componer canciones al mismo tiempo?
Su música es todo actitud, sin reinventar nada, siendo fieles a los cánones que
marcaron los principios de este subgénero musical que está de nuevo tan en auge hoy
en día. Lo que diferencia un poco a estos Violentor de otros grupos es la
intensidad que le meten a las canciones, ceden un poco la batuta de la excelencia
en las composiciones en aras a conseguir un sonido con una pegada demoledora.
Después de una intro muy melancólica y esotérica a base de
piano, los Violentor nos atacan sin compasión con Tormented, dejando claro desde el principio que lo suyo es un
Thrash a la vieja usanza, primerizo y avasallador. Es decir, lo que vamos a
encontrar en el disco de estos italianos es un Thrash sucio, endiabladamente rápido,
con guitarras de riffs pelados y rasposos, con las justas florituras y mucha
actitud.
Recuerdan a bandas como los Razor, Exciter, los Death Angel
del Ultra Violence, o unos Hirax, un Thrash de la vieja escuela, cuando lo de
intercalar guitarras o pasajes melódicos todavía no se llevaba o no se había
inventado.
La labor de la batería es realmente buena, marcando unos
compases con una fuerza brutal y una excelente precisión. Rot por su parte se
deja la voz en cada tema, una voz rasgada pero que no llega a ser tan sucia
como para que no se le entienda lo que dice. Italian Bastards es un tema muy
representativo del nivel de energía y locura que pueden llegar a alcanzar estos
Violentor, donde lo que predomina es la austeridad en las guitarras por encima
de la melodía.
Sin embargo, también tenemos temas como Cunts Must Die donde nos
dejan ver un lado un poco más poético en las guitarras, si entendéis el tipo de
poesía que nos ofrecen estos auténticos thrashers, me refiero a riffs un poco
menos sucios y más adictivos.
En definitiva, un Thrash para los viejos rockeros, primitivo
y poderoso. Recupera el cinto de balas, los pantalones elásticos y el chaleco
de parches, porque con estos Violentor los vas a desempolvar pero bien.
Puntuación: 7/10
very good band, fuking awesome!!!!!!!!
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