1.In
Rumination I - The Void
2.In
Rumination II - Reflections
3.The
Phaneron Eclipsed
4.Ālūcinārī
I - Transcendence
5.Fathoms
of Delirium
6.Ālūcinārī
II - Revelations
7.Spectre -
An Oblivion Awakens
8.Ālūcinārī
III - A Reverie
9.This
Chastising Masquerade
10.Of Ends
Ethereal
11.Ālūcinārī
IV - The Fall
Kartikeya
Sinha - Bass, Vocals (clean)
Ruben
Franklin - Guitars
Arpit
Pradhan - Guitars, Vocals (clean)
Supratim
Sen - Lyrics, Vocals
Otra banda interesante que sale de este país asiático, sus
orígenes se remontan a 2012, al año siguiente sacarían su primer album, así que
esta es su segunda entrega. El primer tema es una de las mejores muestras de lo
que es capaz de hacer este grupo, The
Void combina la fuerza con la la melodía, las acústicas, cierto toque
épico, las guturales de toda la vida, sonando a veces brutales y en otras fases
del tema más ambientales y melódicos, con ciertas dosis de oscuridad, de lo
mejor que nos ofrecen en todo el disco.
Reflections es
otro corte donde se dejan ver las influencias de los maestros Opeth, un tema
minutero donde entra la dualidad de voces, un tema con armonías muy bien
trabajadas , donde de nuevo combinan el melodeath con el death más aguerrido en
otras ocasiones, se puede considerar una pista circular, de esas que tienen un
esquema que parece que vuelve una y otra vez sobre sí mismo.
No tienen reparo en hacer composiciones largas, el que esté
buscando un aquí te pillo aquí te mato de death sueco lo tiene complicado,
aunque también hay de eso, pero en sus pistas incluyen muchas más cosas. The Phaneron Eclipsed destaca sobre
todo por su buena combinación de melodías y atmósfera, esta bien construído
aunque en ocasiones tengo la sensación de que fuerzan demasiado las
composiciones, como buscando elaborar más el tema, darle más vueltas y huir de
lo de siempre, puede resultar un poco cansino con el transcurrir de los temas.
Tomamos un respiro con un interludio acústico y atacamos de
nuevo con Fathoms of Delirium, de
nuevo una combinación de todos los elementos anteriores, melodías, brutalidad,
punteos melódicos, bien pero para mi gusto demasiado forzado, no me convence
del todo. Otro interludio acústico y luego An
Oblivion Awakens, nada menos que trece minutos de tema donde o estás muy
metido o puedes acabar dormitando un poco, reconozco que me cuesta mantener la
atención durante todo el minutaje, no les falta técnica, pero con el
transcurrir del disco las canciones resultan un poco reiterativas, tampoco
busques los estribillos con gancho porque no los vas a encontrar.
Otro interludio acústico para relajarse un rato y luego un
medio tiempo atmosférico con This
Chastising Masquerade, seguido de un tema mucho más cañero en Of Ends Ethereal, haciendo de nuevo
gala de esa dicotomía entre brutalidad y melodía. Fin de la historia con The Fall, una outro acústica. Me sobran
minutos en este disco, o mejor dicho en algunos temas, se hacen demasiado
reiterativos o empalagosos por momentos. En otros momentos sin embargo resultan
brillantes, contundentes y divertidos. Esto demuestra que hacer temas que se
salgan de la estructura habitual, es decir, hacer progresivo de alto octanaje
no sólo es una labor de calidad técnica sino también, quizás más, una labor de
alta calidad compositiva, sino imaginitiva, y eso amigos no es moco de pavo.
Puntuación: 6,75/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario