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jueves, 8 de noviembre de 2018

DREADFUL FATE – Vengeance (2018)


1.Vengeance  (2:15)
2.Death Sentence  (2:37)
3.Altar Of Cruelty  (4:06)
4.Unholy Lust  (3:19)
5.Witches Hammer  (3:49)
6.Hour Of Reprisal  (3:13)
7.Eternal Fire  (2:47)
8.The Final Sacrifice  (3:47)

Bestial - Screams
Total Destruction - Bass
Death Ripper - Guitar
Corpse Skelethor – Battery

El diso de debut de esta banda sueca es lo que os voy a comentar, es la esperada continuación a su demo del año pasado, pecisamente el de su formación, que ya había dejado buenas sensaciones.

Su sonido está influenciado por el típico estilo nórdico del death y del black también, es decir, practican un thrash agresivo, oscuro, sucio y con potencia, dejando de un lado las partes más floclóricas o melódicas que otras bandas del estilo, especialmente de la vertiente americana, tienen costumbre de usar.

Los temas son breves y directos a la yugular, como lo es Vengeance, el más corto del disco, un thrash oscuro y agresivo típico de la escuela alemana de los 80, siguiendo la estela de bandas tan emblemáticas como Sodom o Kreator. Riffs aplastantes y ritmos locos de batería y el punteo simple y austero que encaja perfectamente en esa sonoridad oscura y de estilo under.

Death Sentence sube un peldaño la velocidad, es difícil pero lo logran y sacan un sonido de blackened thrash que a mí personalmente me fascina, pura adrenalina y sensaciones. Altar Of Cruelty recurre a unos riffs más envolventes, menos directos, pero manteniendo la misma velocidad endiablada. Otra nota característica del grupo es la voz rota y putrefacta que se saca de la garganta el señor Bestial, el nickname le va al pelo, tiene un estilo a lo Petrozza en la vocalización pero con mucha más potencia. Es el tema más largo del disco y de los mejores, el típico cambio de ritmo ralentizando el tema con riffs lleva la marca de los Sodom, pegada brutal.

Unholy Lust logra lo que parecía todavía más difícil subir aún más el ritmo de la batería, el martilleo es tremendo y es el esfuerzo y técnica que conlleva también. Después de ese comienzo fulgurante el cambio de ritmo para meter un interludio más propio del heavy le sienta de maravilla, para ir ganando progresivamente velocidad hasta el final. Witches Hammer rompe la dinámica a la que nos tenían acostumbrados hasta ahora con un inicio a medio ritmo, aunque los amagos de arrancada que hace el batera te ponen sobreaviso, finalmente el hachazo se produce y enriquecen el tema con una ralentización ambiental seguida de un punteo speedico que clavan.

Vuelven a las andadas con Hour Of Reprisal, para qué perder el tiempo si es escaso, a tope desde el principio, riffs rabiosos y un solo encabritado típico con un final con sabor black metal. Eternal Fire tiene un inicio típcio del black metal a base de blast beats y voz muy distorsionada. La última bala es The Final Sacrifice que es el tema de thrash más puro de todo el disco, con unos riffs más nítidos y un solo también más de estilo old school, thrash de pura cepa.

Gran debut de esta banda sueca, no se matan a hacer virguerías ni solos masterclass pero saben bien a lo que juegan y las sensaciones que dejan son de pura energía, rabia y oscuridad, sin paliativos.

Puntuación: 8,25/10

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