sábado, 1 de febrero de 2020
JOSEPH THOLL - Devil's Drum (2019)
1. It's Just Rock'n'Roll (4:17)
2. They Fell from the Sky (2:44)
3. Follow the Fire (4:39)
4. Black Birds (2:48)
5. Devil's Drum (3:44)
6. In Eternal Rest (2:57)
7. The Passage by the Sea (3:16)
8. I'm the Machine (2:27)
9. Through Endless Skies (3:06)
Joseph Tholl (ex-Enforcer, VOJD, Robert Pehrsson’s Humbucker) presenta su disco en solitario. Abandonó los Enforcer en 2016 y fue el propio Robert Pehrsson el que le animó a sacar un disco en solitario. Cuenta con la colaboración de diversos músicos como Robert Eriksson (Hellacopters) en la batería en varios temas, pero también Jakob Ljungberg (Second Sun, ex-Tribulation) y Stipen Karlsson (Merciless, Dia Psalma). Otros invitados son Tobias Lindkvist (Enforcer), Pontus Tahir (Dia Psalma) y Malin Stensson.
Este es un proyecto, como suele ocurrir en estos casos, donde el músico prueba cosas nuevas o hace algo sustancialmente distinto a lo que suele hacer en su grupo de base. Empezó a grabarlo en abril de 2018 y básicamente va orientado al rock. Empezamos con It's Just Rock'n'Roll y se podría decir aquello de que el título lo define completamente, un rock con pausas y arrancadas, entre clásico y contemporáneo. Joseph tiene una voz que le pega mucho al estilo y la conjunción es buena, tira sobre todo de emotividad, más que de técnica en este primer corte.
They Fell from the Sky es un tema intenso, de rock con un poco de alternativo, de doom en el transfondo y es que transmite melancolía. Follow the Fire tiene un comienzo muy Savatage en el riff y el ritmo lento, pero lógicamente se orienta al rock y además introduce flashes con un estilo muy vintage que hacen que el tema suene curioso, se ve que Joseph se encuentra en su salsa y haciendo lo que le apetece en cada momento.
Black Birds es un tema corto con distorsión bizarra en los riffs, un poco al estilo Jane’s Addiction, con ese toque transgresor, dominado por las protestonas guitarras, un cambio interesante respecto a cortes anteriores y que mete una nueva dimensión al disco. Devil's Drum es un rock setentero, tiempo pausado, guitarras explorando el lado más sicodélico y rock primitivo al mismo tiempo.
In Eternal Rest viene marcado por un ritmo vivo de caja que no cesa en ningún momento y sobre el que se van superponiendo diferentes voces, silencios de guitarra y derrapadas a las seis cuerdas, tiene un poco aire de jam session, apuntalando la sensación que va dejando el disco de frescura y sinceridad. The Passage by the Sea es uno de los temas que suena más actuales, con unos riffs que marcan el tema y que le dan un toque transgresor y atrevido. I'm the Machine es un tema acústica, formato balada, intimista y un poco sesentero, no está mal, aunque quizás las sucesivas escuchas le quiten frescura o lo hagan un poco cansino.
Acaba con Through Endless Skies, una especie de rock blues pero con un estilo moderno. No es una obra maestra pero es un disco que se caracteriza sobre todo por sinceridad, notas que el artista hace lo que quiere, no busca el sonido comercial ni el estribillo fácil, tampoco el lucimiento técnico pero sí la emotividad y las sensaciones y creo que eso lo consigue en un alto porcentaje en casi todos los temas.
Feeling: 3,5/5
Originalidad: 4/5
Técnica: 3,5/5
Producción: 4/5
Puntuación: 7,25/10
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario